Viudas Negras

La metodología criminal conocida como “viudas negras” es un tipo robo que parte de la seducción y el engaño. Las autoras de este tipo de delitos, por lo general una mujer, recurren a su aspecto y atractivo para llamar la atención de una víctima, regularmente un hombre, con la intención de cautivarlo, lograr ganar su confianza para, posteriormente, adormecerlo con alguna droga y así robarle sus pertenencias.

¿Por qué se las llaman “viudas negras”?

Esa expresión hace referencia a la araña más conocida del género “Latrodectus”. Este arácnido posee un comportamiento poco habitual en el que la hembra, inusualmente, después del apareamiento, se come al macho. Por esta analogía, se describe a la delincuente que, de manera semejante, cautiva a su víctima, la “devora” (en el contexto de despojarlo de sus bienes) y luego lo abandona, en un estado de indefensión y vulnerabilidad.

Un delito en varias etapas

Contacto y atracción: La viuda negra se aproxima a su víctima en lugares públicos, como un club nocturno, un restaurante o un bar. La delincuente se muestra coqueta y amigable, logrando crear una conexión romántica falsa o emocional con la finalidad de apartar a la víctima y llevarla a un lugar íntimo o privado, como un hotel o su casa.

El ardid: En el proceso del “encuentro íntimo”, la viuda negra le brinda a la víctima una bebida, la que ha elaborado con alguna droga o sustancia con efectos de somnolencia, como la escopolamina, benzodiacepinas o similares. Esas drogas pueden ser muy potentes ya que actúan rápidamente, haciendo que la víctima pierda la conciencia en pocos minutos.

El robo: Cuando la víctima está inconsciente, la delincuente aprovecha esa situación para apoderarse de todo lo que encuentre de valor: dinero, tarjetas, teléfonos celulares, joyas, computadoras y cualquier otra pertenencia que pueda cargar para llevar consigo. En algunos casos, llaman a un cómplice que los ayude con esta labor y el transporte.

Emprender la retirada: Después de consumar el robo, la viuda negra escapa de la escena del crimen. Hasta que la víctima no recobre el conocimiento, después de horas o incluso días, no puede realizar la denuncia para que inicie una investigación policial formal. Algunos casos integran la llamada “cifra negra” del delito, ya que, las víctimas no denuncian el robo por vergüenza, porque son casados, u otros factores. Se debe destacar que hubo casos en donde la dosis de somníferos suministrada fue tal, que terminó con el deceso de la víctima, lo que hace mutar el delito, de un “Robo” a “Homicidio” agravando severamente las penas.

La investigación: la gran mayoría de los edificios, hoteles y lugares donde las viudas negras aíslan a sus víctimas para “intimar”, poseen cámaras de seguridad. Estas filmaciones brindan una invaluable colaboración a la investigación en cuanto al aspecto de las victimarias, como así también, sus colaboradores en caso de poseerlos. Asimismo, a través de tecnologías como la identificación facial, permiten establecer la autoría de tales. Otros medios de identificación puede darse a partir de la Dactiloscopía, ya que, al revisar el lugar del hecho, necesariamente deben “tocar” objetos y/o mobiliario y así dejan impresas sus huellas dactilares, para que después sean procesadas en el laboratorio de AFIS (Sistema Automático de Identificación de Huelas Dactilares, por sus siglas en inglés). Hay otras técnicas de investigaciones periciales para dar con las autoras del delito, como por ejemplo el ADN, análisis de dispositivos tecnológicos, entre otros.

Un fenómeno delictivo en evolución

Con el crecimiento de las redes sociales y apps de citas, este delito ha evolucionado. Ahora las viudas negras pueden, además, actuar en un mundo virtual, donde toman contacto con sus víctimas utilizando perfiles falsos, ganando su confianza durante un lapso de tiempo determinado, semanas o meses para luego planear un encuentro en persona y así cometer el robo. La creación de identidades falsas en internet hace que sea más difícil detectar a estas malvivientes, lo que aumenta el riesgo para aquellas personas que procuran tener una cita a través de plataformas.