Con el liderazgo del Ministerio de Infraestructura y el impulso del diputado Juan Fernando Brügge, se presentó la Comunidad Nodo para el Desarrollo del GNC y el Biogás. El director provincial de Biocombustibles, Mariano Santillán, destacó que Córdoba vuelve a ser pionera en la transición energética.
La provincia de Córdoba volvió a ubicarse en el centro del debate energético nacional con la presentación oficial de la Comunidad Nodo para el Desarrollo del GNC y el Biogás, una iniciativa que busca consolidar un modelo de trabajo conjunto entre el Estado, las empresas y las universidades para aprovechar el potencial gasífero argentino. El encuentro, realizado este lunes 13 de octubre en el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos, reunió a funcionarios nacionales, provinciales y referentes de toda la cadena de valor del gas natural.
El evento fue posible gracias al impulso del diputado nacional Juan Fernando Brügge y del ministro de Infraestructura, Fabián López, quienes coincidieron en que el país necesita retomar una política energética de largo plazo. “Estamos ante una oportunidad histórica: convertir el gas de Vaca Muerta en desarrollo, empleo y competitividad”, expresó Brügge, mientras López destacó “la decisión política de Córdoba de promover energías limpias, con una mirada federal y productiva”.
El director provincial de Biocombustibles, Mariano Santillán, coordinador de la organización, fue una de las voces más destacadas del encuentro. “Este lanzamiento es fruto de un trabajo colectivo. Córdoba vuelve a demostrar que puede liderar la transición energética desde la acción y no desde el discurso. La Comunidad Nodo es un espacio donde el sector público y privado se sientan a planificar el futuro del GNC y el biogás con una misma visión de país”, sostuvo. Santillán subrayó que el propósito es “construir un modelo de movilidad sustentable que transforme el potencial gasífero en crecimiento económico y ambiental”.
En esa misma línea, Julio César Secondi, presidente de TAMSE, advirtió que “si no consumimos el gas de Vaca Muerta en los próximos diez años, perderemos todas las oportunidades”. Remarcó que es necesario potenciar el compromiso de las empresas nacionales con el uso de GNC en el transporte público y concientizar al Estado sobre la urgencia de avanzar con infraestructura para flotas de gran porte.
Desde el sector industrial, Ignacio Armendáriz, de Agrale Argentina y CLAUTO, anunció que para 2026 entregarán 200 buses a GNC, y señaló que la infraestructura existente —con 300 estaciones de servicio con surtidores de alto caudal— “debe multiplicarse por ocho” para abastecer al transporte público. “Estamos convencidos de que el GNC será una ventaja tecnológica para el país”, afirmó.
A su turno, Federico Baratella, de la Cámara de Fabricantes de Equipos de GNC, celebró el avance de acuerdos con las automotrices para instalar equipos desde origen, garantizando seguridad y postventa. “Queremos que el usuario que compre un vehículo nuevo a gas mantenga su garantía y pueda abastecerse en una red moderna y segura”, explicó.
Durante la jornada, los distintos actores coincidieron en que la alianza público-privada es la clave para sostener el crecimiento del sector. Ignacio Barousse proyectó que el GNC puede generar 3.000 millones de dólares en divisas en cinco años, reducir el déficit energético y fortalecer la competitividad industrial. Rubén Borello, subsecretario de Infraestructura Gasífera de Córdoba, destacó que la provincia triplicó los gasoductos y conectó 1.300 industrias y 300 estaciones de servicio, y anticipó nuevas líneas de crédito para obras energéticas.
En el cierre, Mariano Santillán remarcó el rol articulador de la provincia: “Este Nodo no pertenece solo a Córdoba, pertenece a la Argentina productiva que quiere crecer con sus propios recursos. Tenemos gas, tenemos tecnología y tenemos empresarios comprometidos. Si logramos unir esos tres factores, el GNC y el biogás serán la base de una verdadera soberanía energética nacional”.
Así, Córdoba se consolida como epicentro del nuevo capítulo energético argentino, donde el gas y el biogás no son solo combustibles del futuro, sino la herramienta concreta para encender el desarrollo federal, sustentable y competitivo del país.